Estimados docentes:
La pandemia por COVID-19 ha causado un gran impacto a nivel mundial, estos meses han sido de grandes desafíos para todos y sin duda ha venido a descolocarnos en prácticamente todos los aspectos de nuestra vida; gobierno y sociedad han tenido que aprender sobre la marcha y trazar nuevas rutas para ir afrontando esta compleja situación. Si bien es cierto que, nuestro escenario es propiamente dentro del entorno escolar, también lo es, que hemos tenido que hacernos presentes a la virtualidad, nuestra forma de dar clases ha dado un giro completo; es bien sabido por todos que la tarea para darle continuidad estos procesos de enseñanza-aprendizaje ha sido ardua y digna de reconocerse.
Ante el inminente cierre del ciclo escolar, ha llegado el momento de hacer una valoración de dichos aprendizajes y antes de asentar la evaluación definitiva, les sugiero reflexionar sobre los siguientes aspectos:
La pandemia por COVID-19 ha causado un gran impacto a nivel mundial, estos meses han sido de grandes desafíos para todos y sin duda ha venido a descolocarnos en prácticamente todos los aspectos de nuestra vida; gobierno y sociedad han tenido que aprender sobre la marcha y trazar nuevas rutas para ir afrontando esta compleja situación. Si bien es cierto que, nuestro escenario es propiamente dentro del entorno escolar, también lo es, que hemos tenido que hacernos presentes a la virtualidad, nuestra forma de dar clases ha dado un giro completo; es bien sabido por todos que la tarea para darle continuidad estos procesos de enseñanza-aprendizaje ha sido ardua y digna de reconocerse.
Ante el inminente cierre del ciclo escolar, ha llegado el momento de hacer una valoración de dichos aprendizajes y antes de asentar la evaluación definitiva, les sugiero reflexionar sobre los siguientes aspectos:
Experiencias vividas: Dentro de la estrategia educativa
nacional, el Secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma Barragán,
impulso que los alumnos durante el tiempo de contingencia formarán una carpeta de experiencias, haciendo hincapié
que no se le denominara de evidencias, esto con el fin de que se incluyera otro tipo de actividades, además de las académicas. Desde el enfoque de nuestra asignatura recoger
estos testimonios, ya sea de forma oral o escrita, podría ser un producto altamente significativo, ya que el enfrentar la pandemia también les dejara a nuestros estudiantes un aprendizaje
para la vida y adicionalmente estaremos desarrollando una
conciencia y pensamiento histórico, basado en “entender el presente, para
prever para el futuro”.
Tomar en cuenta lo ya evaluado: Nuestros alumnos llevaban un proceso de
aprendizaje de dos trimestres evaluados antes de comenzar con el aislamiento y en cada clase impartida sin duda fueron aprendiendo, aunque indiscutiblemente en diferente medida de acuerdo a sus ritmos de aprendizaje, por
ello es pertinente tomar en cuenta el promedio de estos trimestres, ya que es
un referente del avance de los estudiantes. Nunca se pretendió reproducir el
trabajo que se estaba realizado en el aula, porque sería incomprensible, con
base a ello la evaluación también debe ser distinta y ajustada a las diferentes realidades que estamos viviendo. Seguramente no todos los alumnos tuvieron
oportunidad de hacer sus entregas como lo esperábamos, pero lo sustancial es
que a través de diferentes elementos tengamos la certeza de que llevamos a
nuestro alumno al siguiente nivel en su aprendizaje y que éste ha seguido
aprendiendo durante este tiempo.
Valorar lo que se ha aprendido, a pesar de
las circunstancias: En
este periodo de contingencia por el COVID-19, nuestros alumnos no han dejado de
aprender, el cerebro tiene esa capacidad de aprender de manera permanente, lo
relevante de nuestro papel ha sido orientar sobre la forma en que lo están
haciendo, se debe evaluar lo que nuestros alumnos han aprendido de acuerdo a
sus posibilidades, “todo esfuerzo del alumno por acrecentar su cultura debe
ser valorado”; por
ejemplo, una película con contenido histórico que hayan visto y de la cual
puedan realimentar lo aprendido, el recorrido virtual a un museo, un libro que
se encuentren leyendo, estos y otros elementos podrían considerarse para sumar de
manera positiva en la evaluación.
Flexibilidad ante contextos familiares
diversos: No hay polémica
al respecto estos contextos son distintos, cada uno de ellos cuenta con
características propias, que los hacen únicos; desde padres de familia que
perdieron el empleo, afrontar la muerte de algún familiar, alumnos sin
conectividad, otros que inclusive se encuentran trabajando para contribuir al
gasto familiar, varios hermanos que comparten una misma computadora, situaciones
que condicionan o constituyen de cierta manera una barrera en
el aprendizaje; a pesar de esto seguramente muchos alumnos lograron enviar sus trabajos, pero se espera que sean flexibles y comprensivos con aquellos que encontraron ciertas limitaciones para cumplir con sus entregas en tiempo y forma.
Diferentes ritmos de aprendizaje: En el aula con bastante frecuencia
notamos que no todos los alumnos están en el mismo nivel de aprendizaje y en
estos momentos la situación se agudiza aún más, si tomamos en cuenta que todos
aprendemos de forma distinta, también deberíamos comulgar con la idea de que la
evaluación también debe ser distinta y atender a principios de equidad y no sólo de igualdad, todos avanzamos a diferentes ritmos y cada alumno tiene su propio tiempo para aprender.
Humanismo: Este virus nos ha mostrado nuestra fragilidad
y ha generado grandes desigualdades, por ejemplo con aquellos alumnos que no
tuvimos ningún tipo de comunicación sería injusto solo suponer los motivos, ya
que no tenemos la certeza de lo que les haya ocurrido, por esa razón asentar
una evaluación reprobatoria basada en suposiciones generaría incertidumbre e
inequidad, de tal modo que valores como la tolerancia y la empatía, son
fundamentales para realizar una evaluación formativa, hoy más que nunca debemos
evaluar el proceso y de esta forma seguir motivando a nuestros alumnos para que deseen seguir aprendiendo.
Alumnos con promedio reprobatorio: Sin duda este es el escenario más
complejo, en estos casos se sugiere platicarlo con el tutor de grupo y con
otros docentes que le impartan clase, antes de tomar una decisión definitiva, esto
con la finalidad de contar con más elementos, puesto que habrá algunos casos
que hayan presentado ausentismo durante el ciclo escolar, por diferentes
razones como enfermedad, problemas económicos, entornos de inseguridad, entre
otros, existirán alumnos a los que se les pueda apoyar de acuerdo a su
situación particular. Al final, corresponde al docente hacer esta valoración, sin
embargo, se deben considerar que ningún alumno se encuentra en el mismo nivel que el primer día clases, todos
han avanzado, sino donde quedaría nuestra intervención en el día a día
con esos alumnos. Es una realidad que en este momento crítico no se logrará
profundizar en los contenidos, pero lo que si podemos lograr es despertar en
ellos el gusto por la historia y cimentar sus conocimientos, ya que más
adelante en otros espacios, los alumnos tendrán la oportunidad de reforzarlos. Resulta
necesario admitir que vivimos circunstancias que son excepcionales, por lo
tanto, la evaluación de los alumnos también debe serlo y nuestra prioridad en este momento debería enfocarse en reducir al máximo el impacto negativo de esta pandemia no sólo en lo
académico, sino también en lo emocional.
Saludos y mis mejores deseos de bienestar y salud
para ustedes y sus familias.
Atte. Marylú Vera Gress
Jefe de Enseñanza de Historia.
Sector Educativo No. 1
Jefe de Enseñanza de Historia.
Sector Educativo No. 1
Excelente exposición de motivos profesora, le aseguro que lo tomaré en cuenta al pie de la letra para evaluar a mis alumnos;espero que se encuentre bien y le mando mis saludos y deseos de que todo este bien en su familia. Gracias.
ResponderEliminarExcelente reflexión para ser más comprensivos y empáticos
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